Existe en nuestro país una larga tradición de problemas entre vecinos en temas agrícolas. Como buenos agricultores que pensamos ser, lo primero que hemos tenido es una discusión con nuestro vecino y anterior titular -que no dueño- de nuestro huerto.
El buen señor, nos autorizó a empezar nuestras tareas antes de enero (fecha en que estará obligado a dejarlo). Cuando nos vio allí, montó en cólera porque Marisol dobló, por ignorancia, una manguera que tenía en el huerto.
Como el sujeto no merece más, concluyo en este momento, en la convicción de que no estamos a su "altura" en estas lides y poco podremos compartir. Descanse en paz nuestra breve relación.
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